Arjun Popat

Tú Lo Escribirás.

En este día, en este momento,
En este mismo lugar.
Con esta piedra, en esta tierra,
El mundo va a cambiar.
 
Todos se han presentado aquí,
En esta ocasión.
Ya han venido ya verán,
Y ya prestarán atención.
 
Escribimos estas palabras,
Y siempre existirán.
Su significado es para siempre,
Y siempre vivirán.
 
Está decidido que este pacto,
No pueden violar.
Hay dos aquí-y dan testimonio,
Y ahora van a firmar.
 
Está decidido. Será aceptado,
Los dos se respetarán.
Si uno lo dice-el otro lo cumple,
En paz-que ellos vivan.
 
Así tendrán poder igual,
Y no lucharán jamás.
No queremos que haya rencor,
Ni luchas ni peleas
 
Y ahora aquí, a la vista de todos,
El testimonio se cierra.
Escrito está. Efectuado será.
En toda la tierra.
 
Con firmas sangradas lo firmarán,
Aquí pondrán su honor.
Sangre carmesí en piedra.
Intenso, oscuro color.
 
Han dado ya su honor y palabra,
Y ya no lo pueden quitar.
Ya está escrito aquí,
Y lo tiene que respetar.
 
 
 
 
Precintado con magia nuestra
El trato está cerrado.
El decreto firmado en esta piedra,
Siempre será respetado.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Dicen muchas, muchas cosas,
No todos son verdad.
¿Tú crees que todo el mundo ha sido,
Siempre en igualdad?
 
Este mundo ha cambiado,
En formas increíbles.
Formas que ni puedes imaginar,
Sí buenas y sí terribles.
 
¿Quién soy yo? Digamos esto,
No soy de épocas vuestras.
Estoy perdido en vuestra historia,
Yo me quedé atrás.
 
El tiempo es meramente un ciclo,
Se repite año tras año.
Y  vosotros seguís con los mismos errores,
Sólo os hace daño.
 
Diga lo que diga yo,
No vais a comprender.
Pero sí contigo. Quizás contigo.
Te puedo convencer.
 
Hace falta sólo uno,
Uno que sueñe y luche.
Uno que preste atención,
Que aprende y escuche.
 
Eso es lo que hizo él,
Hace cuántos años.
Te voy a contar esta historia,
Que hoy me causa daños.
 
Mira, que en un tiempo pasado,
Amor tendría poder.
Amor-un hombre, una persona,
Lo tienes que entender.
 
En este mundo, todos viven,
El Cielo. El Mar y el sol.
Tenemos Dios, y tiene un socio,
Su socio, se llama amor.
 
 
 
 
El pacto, el trato que leíste antes,
Escrito en la piedra
Es entre los dos-Dios y Amor,
Se seguía al pie de la letra.
 
Supongo que te estarás preguntando,
¿Qué hacía Amor?
Pues, mira. De las parejas que vemos siempre,
Amor fue el creador.

 El Sol. La Luna. ¡Que guapos son!
Tórtolos de verdad.
Existen. Se puede ver la pareja,
En vuestra realidad.
 
El día y noche. Enamorados.
Hasta al fin son amantes.
Sí distintas y tan diferentes,
Y aun así elegantes.
 
Hay más. El Mar y Las Estrellas,
También Agua y Fuego.
Parejas guapas, chulas, perfectas,
Amor las creó, desde luego.
 
Y claro-hay más, por todas partes,
Amor las ha creado.
Pero hay una excepción,
No sé si habrás notado.
 
Mira abajo y mira arriba,
Más allá del techo.
Mira a la izquierda,
Y mira al derecho.
 
Si lees esto en una casa,
No entenderás nada.
Y si lo lees en naturaleza,
Quizás te hayas dado cuenta.
 
¿Quién te mira por encima
Donde quiera que estés?
En cualquier hora, de cualquier día,
De cualquier año y mes.
 
 
 
 
Quién es el, que nunca te deja,
Ni por un segundo.
Quién siempre está cuidando,
De vuestro maldito mundo.
 
Quién no habla, y sólo trabaja,
Quién no puede dormirse?
Quién tiene emociones,
De las que no puede sentirse?
 
Y sobre quién te vas pisando,
Día tras día tras día.
Sin quién, sería este planeta,
Totalmente vacía?
 
Quién os puede sostener,
A vuestro mundo entero.
Quién hace que el mundo entero,
Parezca de peso ligero.
 
No sabes de quiénes estoy hablando,
El Cielo y La Tierra.
Hoy, no viven como amantes,
Pero antes, así sí era.
 
Ahora creo que tú estás listo.
La cuenta ya empezará.
Claro que sí-habrá alegría,
Pero también mucha tristeza.
 
Si digo la pura honesta verdad,
Lo que habrá, es amor.
Pero como seguramente sabrás,
Amor es decir dolor. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Un chasquido de los dedos,
La mirada penetrante.
¿Es nada, verdad? Si lo hace Amor,
Cambiará la mente.
 
“Estamos en paz” dijo Amor,
“Ahora a trabajar.
Quedan parejas que no son juntos,
Y yo las voy a crear”.
 
Ay el amor-qué poca cosa,
Con tanto, tanto poder.
Hace que seamos tan felices,
Nos hace enloquecer.
 
Nos da esperanza, nos da ilusión,
Y luego nos da un sueño.
Y no importa quien seas tú,
Francés, ingles madrileño.
 
No importa que seas un chico
Ni que seas el rey.
Siempre seremos nosotros iguales,
Ante Amor y la ley.
 
Hace falta un chasquido,
Y nadie se lo espera.
Ahora tenemos un par de amantes,
El Sol y sí La Luna.
 
Amor acaba de hacerlas real,
Crea parejas así.
Y algún día decidirá,
Que hoy te toca a ti.
 
Y lo mismo hará-un chasquido,
Y la mirada aquella.
Y ni te das cuenta-te enamoras,
De él, o quizás, ella.
 
El Sol era un hombre normal,
Un hombre corriente.
Ahora se acaba de enamorar,
Cambió totalmente.
 
El Sol le daba poemas a ella,
Poemas alucinantes.
El Sol y la Luna-tórtolas son,
Verdaderos amantes.
 
Poemas así, te doy un ejemplo,
Ya sé te que va a gustar.
De hecho, no. No es verdad.
Te va a encantar.
 
“Quiero decirte que yo te quiero.
Que solo tú serás mi cielo.
Que yo siempre te voy a querer.
Que por favor, lo hay que creer.
 
Quiero verte cada segundo,
Quiero que tú sola seas mi mundo,
Tú me has hecho ver en color,
Tú me has hecho creer en amor.
 
Yo te quiero, no sé por qué,
Ahora no te puedo perder,
¿Cuánto te quiero? No puedo decir.
Este amor-lo hay que sentir”
 
La Luna. El Sol. Juntos siempre,
Qué poco trabajo le fue.
“Es mi deber”, explica Amor,
“Y siempre lo cumpliré.”
 
Y hasta hoy, si miras al cielo,
Sí es posible ver.
Mira al cielo, con mucho cuidado,
Justo al amanecer.
 
Sí claro-se puede ver El Sol,
Pero busca con cuidado.
Y ya verás, La Luna esta,
Ella se ha quedado.
 
Se queda para estar con él,
Y él también lo hará.
El tiempo va, día tras día,
Siempre se repetirá.
 
Pero recuerda-hay un trato,
Lo tienes que recordar.
Haga lo que haga Amor,
Dios habrá que firmar.
 
Antes de que la pareja pudiera,
Existir de verdad.
Dios la tendría que revisar,
Y luego quizás, aprobar.
 
Dios la vio, a él le gustó,
Decidió aceptarla.
Amor creaba parejas siempre,
Y Dios las aprobaba.
 
Y como habrás imaginado,
No todo era así.
Fue roto el pacto escrito allí,
En sangre carmesí.
 
Quién lo rompió, preguntas,
¿Por qué? ¡No hay razón!
¿Se volvió loco, el que lo hizo?
¿No tiene corazón?
 
Tú seguro, que habrás estado,
En un lío alguna vez.
Si es verdad, sabrás también,
Que pierdes la sencillez.
 
Si normalmente piensas bien,
Y nunca haces locuras.
Te puedo jurar, si estás en un lío,
Entonces sí las harás.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Amor estaba obligado,
A ayudar enamorados.
Es su trabajo, su obligación,
Ayudar y darles consejos.
 
Tenemos El Cielo, y La Tierra,
Se querían locamente.
Como el Sol, y como La Luna,
Pero eso es diferente.
 
Dios creó el mundo nuestro,
Y todo sirve por algo.
El árbol, el césped, la oscuridad,
La luz, el agua y fuego.
 
El Cielo existe y su deber,
Es mirarnos a todos.
¿Engañarle? Ni se te ocurra,
Nunca va a dejarnos.
 
Cuando parece que todos te dejan,
Y nadie te ayudará.
Cuando parece que no hay nadie,
El sí estará.
 
La Tierra nos ayuda también,
Siempre nos sostiene.
Qué fuerte, qué valiente es.
Qué coraje tiene.
 
Nunca queja, nunca habla,
Trabaja y ya está.
Nunca se queja, ni un poquito,
Tan buena y tan honesta.
 
Los dos estaban enamorados,
Amor se enteró.
Pensó en esta relación,
Pensó y deliberó.
 
“¿Se lo digo a Dios,
Debo ignorarlo?
Lo único que yo quiero,
Es poder pensarlo”.
 
No sé si tú has entendido,
Hay un problema aquí.
Esta pareja no puede ser,
No puede ser así.
 
Tendrían que reunirse siempre,
Sería imposible.
El Cielo cayendo a La Tierra
Sería increíble.
 
La gente no lo aceptaría,
No lo comprendería.
Amor sabía que a Dios,
No le gustaría.
 
Este problema realmente,
No tenía remedio.
No era posible crear la pareja,
Sin aprobación de Dios.
 
No aceptaría la relación,
No iba a comprender.
En estos momentos, Amor no sabía,
Qué podía hacer. 
 
Sólo diría que todo el mundo,
Tendría que trabajar.
Y cualquier cosa que lo impidiese,
No podría pasar.
 
¿Necesario? ¿Injusto? A lo mejor,
Eso es opinión.
Eso sí-está muy claro,
Que así las cosas son.
 
Este problema imposible.
¿Cómo resolverlo?
No podría pedir ayuda,
Habría que solucionarlo.
 
Así son nuestras vidas hoy,
Llenas de problemas.
Nunca se sabe qué hay que hacer.
Siempre hay tantos dilemas.
 
 
 
 
Y cuando no sabes que quieres hacer,
Ni lo que sería correcto.
Si no sabes qué es verdad ni mentira,
No sabes qué es justo.
 
A veces pensarlo no es bastante,
No lo resolverá.
Una decisión con dos opciones.
A veces hay que tomarla.
 
Y sí, cometerás errores,
A veces harás locuras.
Si no repites los mismos errores,
Algún día aprenderás.
 
Algún día, valdrá la pena,
Cada momento duro.
Algún día, comprenderás,
Que todo viene a cero.
 
Cuando morimos, nos damos cuenta,
Lo poco que tiene valor.
El día que mueres, te das cuenta tan tarde.
Que poco tiene valor.
 
Si consigues comprenderlo,
Entenderás la vida.
La vida te será más fácil,
Tranquila y divertida.
 
¡Huy! Me he perdido tanto,
La cuenta está esperando.
A ver. Venga. Volvamos allí,
Te voy a seguir contando.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Amor se preguntaba más,
“Cómo salir de esto”.
Tengo que ayudarles a ellos,
Y tengo que ser honesto.
 
Eso no es una elección,
Ni es un problema.
Sólo acabará conmigo,
Este maldito dilema.
 
Supongo que hablaré con Dios,
Tendré que decir la verdad.
El podrá ayudarme quizás,
Resolverlo con facilidad”.
 
Así lo hizo, le vino a ver,
Se encontró con Dios.
“Dios. Me puedes ayudar,
Arreglar asuntos míos”.
 
“Es que tengo un problema,
Me lo puedes resolver”.
Amor le dijo lo que pasaba,
Trató de explicarle.
 
“Pues eso es, amigo mío,
No sé qué puedo hacer.
Decida lo que decida hacer,
No te puedo satisfacer.”
 
Dios no dijo ni una palabra.
Silencio ensordecedor.
“No sé qué decirte,” Dios le dijo,
A su viejo amigo Amo.
 
“Yo te quiero ayudar,
Pero las cosas son así.
Acuérdate del pacto aquel,
En sangre carmesí”
 
“No lo podemos cambiar,
Y amigo, deber es deber.
Tengo las manos bien atadas,
No sé qué puedes hacer.
 
 
 
 
Yo no puedo permitir,
La pareja aquella.
No puedo dejar que él se vaya,
A estar con ella.
 
Los dos tienen que trabajar,
No pueden marcharse así.
Amigo-no es que no te comprenda,
Pero compréndeme a mí”.
 
Haz lo que quieras, hazlo bien.
Que hagas lo que puedas.
Yo no te voy a poder ayudar
Que tengo las manos atadas.”


“Por favor, amigo, piensa.
Me puedes ayudar.
Te pido. No me queda más,
Te ruego de verdad.
 
Sólo permite esta pareja,
Una excepción.
Te pido. Hazlo por nosotros,
No tengo otra opción”.
 
Amor tenía ojos mojados,
Empapados de llanto.
Sólo quería amor el mundo.
Amor sí es un santo.
 
“Amigo. No me lo hagas difícil,
He dicho que no es posible.
Si pudiera, te daría todo que tengo,
Pero ya. Es imposible.
 
Por cierto amigo-no rompas el pacto,
Tú serás castigado.
No hagas una estupidez,
Tienes que contemplarlo.
 
Venga no te pongas así
Tú vas a estar bien.
Se te ocurrirá una idea,
Piénsalo bien.”
 
Amor ya lo había pensado,
Sabía que fue el fin.
El fin del pacto escrito en sangre,
En sangre tan carmín.
 
Sangre ya antigua y muerta,
Sangre ya cansada.
Sangre ya bastante amarga
Sangre marchitada.
 
Amor se fue y lo decidió,
Pensando unos días.
Ya tomaría la decisión,
Que cambiaría las vidas.
 
Si fueses Amor, en su posición,
Qué decidirías hacer.
Piénsalo bien. ¿Qué hizo Amor?
Pronto, vamos a ver.
 
Ahora, si miras al horizonte,
Ves El Cielo y Tierra.
¿Juntos son? Decídelo tú.
¿Son juntos? ¿Alguna vez lo eran?
 
Ahora tienen la pena más fuerte,
La pena más dolorosa.
Son casi juntos. Se ven y se hablan.
Y eso sí es hermosa.
 
Pero nunca jamás serán pareja,
El amor no conocerán.
Nunca lo van a poder sentir,
Y nunca lo entenderán.
 
‘Pero ¿por qué?’ te preguntarás,
¿Amor lo decidió?
Pues eso ya te contaré,
Que es bastante complejo.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
“El tiempo es meramente un ciclo,
Se repite año tras año.”
Y  vosotros seguís con los mismos errores,
Sólo os hace daño.”
 
¿Te acuerdas? Te lo dije ante,
Y ahora, es importante.
Amor nunca decidió,
Ya sé que es irritante.
 
Querías un final feliz,
Pues no lo encontrarás.
Se toma la decisión ahora,
Ahora y en unos días.
 
Nadie decidió qué hacer,
Nadie todavía.
La decisión tan importante,
La tomarás en tu vida.
 
No es una decisión suya,
Tú la tomarás.
Sólo tú sabrás que hacer,
Tú te influenciarás.
 
Elijas lo que elijas tú,
Te va a influenciar.
No sólo eso. Hará mucho más.
Te va a cambiar.
 
¿Qué se hace en líos así?
¿Amigos, amor o deber?
¿Qué haces en el momento ese,
Si hay que escoger?
 
¿Y vale la pena luchar por tus sueños,
Luchar por ilusiones?
¿Sólo tenemos nuestros sueños?
¿O sólo son opiniones?
 
Tantas preguntas, ¿hay una respuesta?
es mucho más difícil.
Encontrar a esta respuesta,
No te será muy fácil,
 
 
 
 
Miro a mi reloj de arena,
No queda mucha arena.
Parece que no tengo más tiempo,
El reloj ya no está lleno.
 
Mis horas ahora se van cortando,
Pronto me voy a ir.
A ti te quedan muchos años,
Muchos que vivir.
 
Espera, recuerda esto bien,
La decisión de tu vida.
Decide como la vas a vivir,
Ya he decidido la mía.
 
A fin de cuentas, después de todo,
La vida, tú la vives.
Esta cuenta está muy viva,
Y tú. Solo tú la escribes.
 
Todavía no he acabado,
No acabaré jamás.
Quizás porque no hay un final.
Tú lo escribirás.
 
 
 
 
 
 

All rights belong to its author. It was published on e-Stories.org by demand of Arjun Popat.
Published on e-Stories.org on 04/04/2012.

 
 

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